Denuncian represión y atropello policial en la 1ª manifestación republicana en Madrid tras la huida de Juan Carlos I

La manifestación republicana convocada para este domingo,  partió a las 20:30 desde la Plaza de Oriente. Más de cien manifestantes han exigido el fin de la monarquía corrupta y de toda la herencia franquista. No obstante las fuerzas represivas han obstaculizado en todo momento su desarrollo, llegando a impedir el paso en varios tramos del itinerario programado hasta Sol, identificando a sus pacíficas participantes y  periodistas que trabajaban en la cobertura del evento. Finalmente han procedido a detener a un manifestante (al que han golpeado y empujado al suelo) por motivos -desde luego- aún desconocidos. Hasta esta madrugada, momento en que cerramos esta noticia, continuaba detenido en Moratalaz.

Actualización:

12.30 pm: Finalmente el manifestante detenido se encuentra en libertad. Actualizaremos

9 am: Las organizaciones convocantes informan que habiendo pasado ya más de 12 horas y el compañero detenido ayer en la manifestación comunicada contra la Monarquía continúa sin poder reunirse con su abogado. El compañero detenido es diabético y necesita atención sanitaria. Desconocemos el estado de salud y dónde de encuentra, pese a nombrar abogado nada más entrar en comisaría. El letrado designado ha llamado a la comisaría de Moratalaz, donde supuestamente fue trasladado el detenido, y los funcionarios de la policía nacional no le dan ningún dato sobre el detenido. Vergonzosa actuación de la policía que no sólo intentó impedir la celebración de una manifestación comunicada, sino que agredió y detuvo a un compañero sin ningún motivo, impidiendo que su abogado se reúna con él tras más de 12 horas desde la detención.

Hemos recibido hace instantes la denuncia sobre la represión acaecida en la tarde de este domingo. La consignamos a continuación:

Las organizaciones convocantes de la manifestación contra la monarquía tras la huida del borbón denuncian represión y atropello policial, al tiempo que reafirman su voluntad de continuar la lucha contra la Monarquía y toda la herencia franquista.

Hay momentos privilegiados en los que se concentra el significado de décadas y la tarde extremadamente calurosa del 9 de agosto en la que ha tenido lugar la manifestación contra la monarquía ha sido una de ellos.

Contra todo pronóstico, en un Madrid desierto y ante el silencio mediático más absoluto, más de doscientas personas han acudido al llamamiento de organizaciones políticas, sindicales y sociales.

Éramos conscientes de la extrema gravedad política de la evidencia del latrocinio de la monarquía, escenificado con la huida del monarca “emérito” ladrón, y de que era necesaria una inmediata respuesta del pueblo.

Sobre todo cuando, para mayor escarnio, la huida fue organizada por el gobierno y pagada con fondos públicos

La convocatoria de movilización popular, aún simbólicamente, debía servir para expresar la ira de un pueblo – mil veces pisoteado – pero el único depositario de una dignidad y soberanía enfangada, ahora, una vez más, por un gobierno “progresista”.

Y nos encontramos en la Plaza de Oriente, con el Palacio Real a la espalda y cara a cara con el Estado policial. Una dotación policial desmesurada y con las furgonetas de antidisturbios mandados por el gobierno “progresista”.

A pesar de que la manifestación estaba debidamente comunicada (y aunque no lo estuviera) y el silencio administrativo debe interpretarse positivamente, sobre todo cuando se trata de derechos fundamentales como el de manifestación, el desproporcionado dispositivo policial pretendió impedir la manifestación en su comienzo en la plaza de Ópera.

Allí fue brutalmente detenido nuestro compañero Luis, quien – obviamente desarmado – fue derribado y aplastado contra el suelo, perdió sus gafas y fue esposado con la brutalidad que las imágenes muestran.

Ante el avasallamiento del derecho de manifestación y tras haber sufrido la identificación de varias decenas de manifestantes por la policía, el grueso de los asistentes decidió encaminarse hacia la Puerta del Sol por calles aledañas que confluyeron en la calle Mayor y finalmente, en la Puerta del Sol.

Allí con la rabia acumulada y las gargantas desgañitadas por los gritos con los que se denunciaba tanta ignominia se leyó el Manifiesto que se adjunta.

Tenemos todavía fresco el recuerdo de los fascistas ocupando las calles en pleno confinamiento y sin intervención policial alguna. Ante ello, y lo ocurrido hoy y la represión sistemática contra quienes reclaman derechos y libertad, cabe preguntarse ¿es que quizás al gobierno progresista le interesa agitar el espantajo de la extrema derecha, al tiempo que le conviene aplastar cualquier movimiento que surja a su izquierda?

Cuando desde el Gobierno se aplastan de derechos fundamentales en una situación tan grave como la que estamos viviendo, hay que afirmar ,como hace el Manifiesto leído en la Puerta del Sol que

“no queda, ni en el Gobierno, ni en las instituciones, el mínimo de decencia para perseguir a los mayores delincuentes” y por lo tanto “Tendrá que ser el pueblo quien lo haga. Tendrá que asumir la clase obrera y los pueblos del Estado español, la tarea pendiente desde la Transición: barrer tanta podredumbre y arrumbarla en el basurero de la Historia”.

La sumisión vergonzosa del gobierno y del poder judicial al encubrimiento de un delito de Estado de tal envergadura deja tras de si un vacío democrático – nunca mejor dicho – que el pueblo debe llenar. El enfangamiento del gobierno en la huida del borbón padre, no sólo no apuntala al borbón hijo, sino quede la forma más escandalosa hace al PSOE y a Podemos, cómplices de toda su podredumbre.

Si, para mayor escarnio nos caen multas por “alterar el orden público” éstas serán un acicate más para ampliar la solidaridad y la voluntad de lucha, en primer lugar con el compañero detenido. Pero sobre todo, las organizaciones convocantes reafirmamos que asumimos que ha empezado una etapa de lucha nueva y que la continuaremos hasta acabar con la Monarquía y con toda la herencia franquista representada en la Constitución y las instituciones del Régimen del 78.

Ángeles Maestro

Luis Gimeno, manifestante detenido ayer en Madrid: «No soy un delincuente, los delincuentes están en la Zarzuela»

Por Diana Cordero. Publicado el Ago 10, 2020

Ayer se realizó la primera marcha republicana en Madrid. Las organizaciones convocantes denunciaron la represión y el maltrato policial. Luis Gimeno fue víctima de esta violencia, detenido y liberado recién 18 horas después.

Leímos los comunicados de las organizaciones convocantes, escuchamos la preocupación de sus compañeras y compañeros, vimos las fotos y vídeos de su detención.

Y esperamos… esperamos hasta que finalmente al mediodía de hoy pudo salir en libertad. Pasó la noche en Moratalaz. Está lastimado, fue maltratado e injustamente detenido, desde luego. Para que podáis verlo os compartimos el vídeo que evidencia la violencia con la que fue detenido.

Luis quiso conversar con Kaosenlared. Aquí está su entrevista. Tenemos imágenes de sus heridas producto de ese atropello. Luis es diabético y cualquier pequeña herida puede complicarse. Se los advirtió a quienes le detenían, la respuesta fue «Te lo debías haber pensado antes». El Sindicado Solidaridad Obrera emitió un comunicado en apoyo a Luis Gimeno repudiando la detención de su compañero y afiliado, al tiempo que exige la dimisión del Delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco. Se adjunta al pie.

Esta detención y este maltrato, es algo que no debía haber sucedido, pero parece que el «progresismo» gubernamental se  hace esperar.

SOLIDARIDAD OBRERA EXIGE LA DIMISIÓN DEL DELEGADO DEL GOBIERNO EN MADRID, JOSÉ MANUEL FRANCO

En el día de ayer, 10 de agosto de 2020, miembros de la Policía Nacional detuvieron violentamente a Luis, afiliado a nuestro sindicato, Solidaridad Obrera. La detención se produjo durante el transcurso de una manifestación en Madrid contra la huida de Juan Carlos de Borbón de España, y por la proclamación de la República. La grabación de la detención, que está accesible en las redes sociales gracias a la labor de defensa de los derechos civiles y de control de la arbitrariedad de los poderes públicos llevada a cabo por muchos ciudadanos anónimos, habla por sí sola: Luis fue detenido sin ningún motivo, de forma violenta, innecesaria e injustificada. No había cometido delito alguno y, ni tan siquiera, se resistió a su detención, pero fue agresivamente tirado al suelo por los policías actuantes y, además, ha estado detenido y privado de su derecho a hablar con su abogado durante más de 12 horas.
Las medidas sanitarias contra la pandemia de Covid-19 se han convertido en la excusa para una creciente deriva represiva y autoritaria en nuestro país. En Solidaridad Obrera hemos visto como se nos ha prohibido en los últimos meses nuestro derecho constitucional de reunión, ilegalizando nuestras manifestaciones en defensa de los derechos de la clase obrera en varias ocasiones; expedientando a nuestros delegados por denunciar públicamente las aglomeraciones en el Metro de Madrid; imponiendo un espeso manto de silencio sobre nuestras denuncias (tanto laborales como penales) ante los incumplimientos en las medidas de prevención y seguridad laboral en sectores como el de Telemárketing o la Administración Pública.
La Delegación del Gobierno en Madrid, que no hizo nada para cerrar, durante el estado de alarma, empresas que tenían la orden de la inspección de trabajo de paralizar sus actividades por su incumplimiento de las medidas de prevención de el Covid como la multinacional Konecta, es la responsable última de que los agentes policiales, sin motivo ni justificación legal alguna, hayan detenido a nuestro compañero por participar en una manifestación que reclamaba la elección democrática, y no hereditaria, de la figura del Jefe del Estado, así como la apertura de un proceso constituyente, y denunciaba la huida de España de una persona sospechosa de corrupción.
La Confederación Sindical Solidaridad Obrera no va a permitir que se vulneren impunemente las libertades civiles de sus afiliados y que se cercenen los derechos de la clase trabajadora. No vamos a permitir que las medidas sanitarias contra la pandemia se conviertan en la excusa para una deriva autoritaria ni para una dictadura encubierta. Igual que nos hemos querellado penalmente contra algunas de las mayores multinacionales del contact center, como GSS Covisian, por no cumplir, presuntamente, las medidas de seguridad en el trabajo, y que nos hemos manifestado en las calles en defensa del empleo y de la sanidad pública, vamos a organizar a la clase trabajadora contra cualquier intento de convertir la pandemia de Covid-19 en una mascarada para imponer una dictadura de facto.
Por todo ello. Exigimos la dimisión inmediata del Delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, que permite que sus subordinados hagan la vista gorda cuando los empresarios incumplen las normas sanitarias básicas en los centros de trabajo y, sin embargo, les deja que practiquen la violencia injustificada contra los manifestantes de las clases populares.
Toda nuestra solidaridad con Luis.
SI nos tocan a unx nos tocan a todxs.
Seguiremos luchando hasta que se exilien todos los Borbones.

Confederación Sindical Solidaridad Obrera.